Habilidad de Recuperación para Evitar Lesiones
La habilidad de tu cuerpo para recuperarse de los entrenamientos es un factor que debe entenderse muy bien y te puede servir para evitar lesiones en un futuro. La recuperación es el proceso mediante el cual el cuerpo se adapta a los diferentes tipos de estreses a los cuales es sometido. Es la respuesta de adaptación de la recuperación lo que realmente mejora el rendimiento deportivo.
Una falta de recuperación o una recuperación sub-óptima hace que uno esté más propenso a lesionarse. Por ejemplo, si utilizas mucho peso o carga en determinado ejercicio, y tu recuperación es pobre, el cuerpo no va a poder retornar a su máxima capacidad de una sesión de entrenamiento a la otra.
La inhabilidad del cuerpo para recuperarse adecuadamente puede ser percibida de muchas maneras. Dolor e incomodidad en varias partes del cuerpo son los síntomas más comunes. Otros síntomas incluyen cambios en las palpitaciones cardiacas, presión arterial alta, supresión del apetito, problemas para dormir e insomnio, pesadez, falta de motivación, irritabilidad y cambios en el estado de ánimo.
Muchas personas y atletas que hacen mucho ejercicio físico describen esto como un sentimiento de agotamiento prolongado, sueño gran parte del día, cansancio más de lo normal y un sentimiento como de quedarse “sin baterías”. Todo esto son claras señales de una posible fatiga neural y falta de recuperación.
Hay muchas señales de advertencia. Un síntoma muy común es cuando la persona no duerme muy bien e incrementa al mismo tiempo el volumen de entrenamiento o las sesiones. Ambas van afectar grandemente la recuperación muscular. También se pueden sentir síntomas de dolor en articulaciones y rigidez en la espalda baja o parte trasera de los muslos.
Construir una base de conocimientos mejor sobre los estreses que se ponen en el cuerpo, la recuperación necesaria para adaptarse a estos estreses y cómo comprender el estado actual en que se encuentra el cuerpo, deben ser las mayores prioridades de un atleta.
Ahora bien, muchos dirán: “para eso es que tengo a mi coach” o “por eso visito a mi masajista”. Pero la simple verdad, es que no importa que tan bueno sea tu coach o masajista, ellos no saben más acerca de lo que realmente estás sintiendo en tu cuerpo. Ellos te pueden ayudar en gran escala, pero solamente tú, puedes saber realmente como te sientes.
Ser capaz de entender tu cuerpo, tu entrenamiento, la capacidad de recuperación y como estos factores interactúan entre sí, abre una habilidad sumamente importante para tu éxito como atleta o deportista serio.
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